CAMBIOS…

Nada bueno el «amontonar» todo en un día…
Por: Víctor Galván y Soza

PRIMERA… Hay un motivo, para mi muy poderoso, por el que asisto con mucho agrado a las sedes en donde se lleva a cabo Nascar Toyota Series. El reencuentro con amigos de la vieja guardia. Pero al mismo tiempo me da mucho coraje ver y sentir la poca afición de muchos jóvenes que van a «cubrir» las competencias del serial, lo he dicho y ahora lo reitero.

Estos jóvenes no sólo no saben nada de automovilismo sino que además únicamente tienen en mente y en sus conversaciones al futbol, pero eso no es lo peor, lo fastidioso viene cuando pretenden imitar a los comentaristas de las distintas televisoras que a diario saturan las pantallas de las «teles» con noticias sobre el deporte llamado por algunos, «el opio de los pueblos», allá ellos y su pobre mentalidad.

Una prueba palpable de lo que afirmo es la jovencita que hace los comentarios y entrevistas para FOX 3, ya hizo «Campeón» a Daniel Suárez y además lo felicitó por «estar refrendando su título». ¿Qué les parece? Sí no sabes, pregunta –me decía mi abuela– y si te da pena preguntar, por lo menos lee, estudia un poco, en la carpeta de prensa que te pueden proporcionar hay suficiente información, que, estoy seguro te va a ayudar y mucho, para que no pases vergüenzas.

SEGUNDA… De las cosas amables que me tocó vivir el pasado fin de semana fue la conversación con mi gran amigo Arturo Navarro, representante de AKRON, recordamos tiempos idos. De igual manera tuve la oportunidad de platicar con el Doctor Mario Domínguez, padre del piloto del mismo nombre, un verdadero caballero.

De las instalaciones del óvalo de San Luis Potosí, poco hay que decir, como no sea lo mismo que en otras ocasiones he señalado. Están horribles. Los sanitarios son un verdadero asco, de dar pena. No han mejorado para nada, no tienen la suficiente agua para que la gente que presta sus servicios como personal de limpieza pueda hacer medianamente su trabajo. La zona de estacionamiento parece un verdadero monumento al polvo y a las piedras, una buena -o por lo menos regular- aplanada le vendría bien y a pesar de estar en esas condiciones ¡cobran!

El contraste, para bien: Las atenciones de los amigos de prensa de Nascar México, son en verdad de primer nivel. Me tratan como si en verdad me lo mereciera, gracias mil a Miguel Sánchez, a Laurita, a Luis Aveleyra y a Hugo, son buenos anfitriones y mejores amigos. Disculpen tanta lata, pero en verdad, inspiran tanta confianza que me siento como en mi propia casa.

TERCERA… Pues no, no me gusta para nada el nuevo formato implantado por la organización para las distintas etapas de Nascar Toyota Series. Eso de programar en un sólo día todas las actividades como que, para mi gusto, no funciona nada bien. Me explico.

El quitar un día de actividades merma la atención de la gente aficionada que antes asistía al óvalo o al circuito, el sábado. En San Luis se esperaba –y también ya la quitaron–, la carrera llamada «Última oportunidad», era un atractivo extra. Lo más sencillo fue sacar de la parrilla, de acuerdo a los números, a quien tenía el tiempo más bajo en las prácticas.

¿Por qué no dar oportunidad en la pista de demostrar que si pueden mejorar, o de perdida que les sirva de consuelo luego de haber invertido una buena lana para asistir a la competencia, una carrerita de 20 minutos y se justificaba el gasto, de perdida, ¿o no?

CUARTA Y REVERSA… Los organizadores argumentaron que con amontonar prácticas, calificaciones y competencias en un mismo día rebajarían los costos, FALSO, el 90% de los equipos llegaron a San Luis Potosí desde el viernes anterior, algunos pilotos entrenaron ese día. ¿Cuál ahorro en los gastos?

Se perdió un día de difusión en los medios de información, por lo menos en los locales, los pilotos y sus equipos asistieron el jueves y viernes a entrevistas, pero el sábado no pudieron ni respirar tranquilos, tuvieron que entrenar a marchas forzadas en busca de la puesta a punto de su Stock, tanto los V6 como los Nascar México. Bueno, ya que quieren quitar de un plumazo al más lento ¿por qué no quitan a los seis más lentos? En lugar de formar una parrilla con 35 autos, pues arrancarían 28 o 29, para un óvalo de media milla como el potosino sería la cifra ideal.

Recuerden, amigos organizadores: la cantidad, para nada es sinónimo de calidad, la prueba está en que de los 35 que tomaron la verde sólo nueve terminaron en la vuelta del ganador, quien terminó en el lugar 30 únicamente dio 166 vueltas al mini-óvalo, hasta se puede pensar en que entre menos autos en la competencia se reducirían los choques. «Es de sabios cambiar de opinión». Y hasta los próximos CAMBIOS…

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