Johan Kristoffersson consiguió su cuarto título del Campeonato Mundial FIA de Rallycross luego de un espectacular fin de semana en el Nürburgring (Alemania), donde le arrebató la corona a su compatriota sueco Timmy Hansen, en un dramático «heat a muerte».
En los primeros días de septiembre, Kristoffersson se veía lejos del título, a 28 unidades del liderato luego de que las tres primeras salidas fueron desastrosas. Descalificado de la Q1 en Cataluña debido a un dispositivo de información desconectado, víctima de una ponchadura en la prueba de casa en Höljes y con problemas de transmisión en Francia, compuso el camino con victorias consecutivas en Letonia y Bélgica, y viajó a Alemania a 17 puntos de la cima.
Un tercer triunfo en el año este sábado (sumado a la descalificación de Hansen), cortó el déficit a cuatro unidades, previo a la segunda etapa del World RX en Alemania.
Hansen describió la Q1 y su esfuerzo como «darlo todo – una endemoniada carrera», con Johan bromeando sobre su propio desempeño, «un poquito mejor que la ‘endemoniada carrera’ de Hansen».
Timmy Hansen le dio la vuelta a la tortilla en la Q2, pero una salida perfecta en la Q3 por parte de Kristoffersson le dio la ventaja temporal y le colocó a tres puntos al entrar a las seminifinales.
Johan ganó la primera a medio galope, y mientras Hansen hacía lo propio, pero Timmy fue penalizado con siete segundos por hacer contacto con Niclas Grönholm y provocarle un trompo. Eso redujo la ventaja a un sólo punto al llegar a la final, con Kristoffersson arrancando en la pole position; mientras que Hansen lo hizo en la parte final de la parrilla.
Cuando las luces se apagaron, fue Kevin Hansen, en el segundo auto del Hansen World RX Team Peugeot 208 quien se fue al frente, tomando la iniciativa por la parte externa, con Kristoffersson y el mayor de los Hansen tomando la vuelta comodín en el primer giro.
Kevin tomó su comodín en la siguiente vuelta, y retuvo la posición frente a los contenientes al título, dejando a Grönholm en el liderato. Cuando el finlandés puso tierra de por medio, el joven Hansen hizo todo lo posible para jugar en equipo y contener a Kristoffersson para beneficio de su hermano, pero no hubo una buena respuesta de Timmy y el tercer lugar del piloto de Audi fue suficiente para cerrar la temporada como campeón.

Al terminar empatados en puntos, el primer criterio de desempate fue el número de victorias de Kristoffersson.
«Qué fin de semana tan increíble, ¡es loco!», dijo Johan Kristoffersson. «Tuvimos un inicio de año muy rudo, y llegamos aquí 17 puntos detrás, para terminar empatados en puntos, va a tomar un tiempo asimilar esto, para ser honesto. Ganar el campeonato tras iniciar con un nuevo equipo y un nuevo auto es simplemente fantástico. Significa demasiado».
Perder ante el piloto más exitoso en la historia del Rallycross no es vergonzoso para los hermanos Hansen, quienes se combinaron para asegurar su tercer título por equipos, en el Hansen World RX Team.
En la categoría eléctrica, Guillaume De Ridder se convirtió en el primer monarca de la clase FIA RX2e Championship.
Resultados finales:
1. Niclas GRÖNHOLM (FIN) GRX-SET World RX Team 6 vueltas
2. Kevin HANSEN (SWE) Hansen World RX Team +4.031s
3. Johan KRISTOFFERSSON (SWE) KYB EKS JC +4.259s
4. Timmy HANSEN (SWE) Hansen World RX Team +5.480s
5. Guerlain CHICHERIT (FRA) Unkorrupted +8.759s
6. Enzo IDE (BEL) KYB EKS JC +16.091s
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